Comer en Madrid en los mejores Restaurantes

El sábado por la mañana nos acercamos a Comer en Madrid al Restaurante Vegetariano Artemisa, uno de los más veteranos y conocidos de Madrid.

No suelo visitar mucho los Restaurantes Vegetarianos, esta creo que iba a ser mi sexta o séptima vez que acudía a comer a uno, animado por mis últimas experiencias positivas en estos restaurantes que no por dejar de usar carne en sus elaboraciones tienen porque estar exentos de sabor.

Por lo que decidimos reservar en el Restaurante Artemisa para comprobar que tal se comería en este Vegetariano tan conocido de Madrid.

Acompañanos a comer en el Restaurante Artemisa.

El Restaurante se encuentra muy cerca del Congreso, en la calle autodenominada por los restaurantes de la calle Ventura de la Vega, por la “Calle Sabor”, debido al alto número de restaurantes en esta calle.

Al estar en un sitio muy centrico, ya sabeís, o usamos el transporte público o deberemos de ir a dejar el coche a un parking cercano como el de sevilla.

El Restaurante al entrar parece acogedor, con muchos elementos decorativos florales y algunos elementos de piedra y de madera.

En la mesa no vemos ningún elemento decorativo.

De bebidas, ofrecían cervezas de origen biológico por lo que aprovechamos para pedir a parte de agua, una cerveza de biológica de trigo, una cerveza bastante suave proveniente de alemania que sirvió para probar algo diferente.

De aperitivo nos sirvierón dos mini biscottes con pate de humus de tofu, al menos es lo que nos dijeron al preguntar a la camarera, pero supongo que sería pate de tofu y humus,  acompañados de algunas verduras cortadas, el pate tenía buen sabor aunque una textura un poco más que pastosa.

Para comer pedimos un plato para compartir y dos platos principales, para compartir nachos con guacamole y de platos Seitan a la plancha y Suprema del Casar.

Los nachos llegarón a la mesa pronto, la cantidad de los nachos acorde con el bol de guacamole que nos pusierón, estaban buenos, aunque algunos estaban muy sosos y otros con mucha sal, en cuanto al guacamole, tenía buen sabor aunque estaba muy suave, y tenían algunos elementos extraños, la parte inferior del guacamole estaba llena de maiz dulce, algo que mataba el sabor característico del guacamole.

El plato que más nos gusto, aunque tengo que decir, que esta vez teníamos poco donde elegir, fue el “Seitán a la plancha con salsa Mediterránea“, este plato en el que nos presentan al seitán a la plancha pero con aspecto de estofado, y con acompañamiento de arroz, tenía aspecto de seta y consistencia parecida aunque un sabor algo más fuerte, no llego a maravillarnos pero de lo que probamos en este restaurante en el día fue lo que más nos gusto junto a los nachos.

El otro plato principal que probamos fue  Suprema del Casar, consistente según la carta en Salteado de Trigeros, cebollita, champiñón y Trufa sobre un lecho de pimientos Horneados y todo ello gratinado con Torta del Casar,  todos los elementos me gustaban y la descripción me llamaba bastante la atención, pero una vez en el plato me pareció más un amasijo de elementos con queso encima que otra cosa, partiendo de que mi entendimiento por algo gratinado es muy distinto del que tuvo el cocinero y que en cuanto al sabor no llegaba a conseguir una unión entre los elementos, aquel plato se convirtió  en un mezla incoherente de verduras sepultadas en una masa de queso, que además no tenía ese sabor intenso que tengo en mente, del sabor  de una torta del casar, ME DEFRAUDO TOTALMENTE, aun más que el acompañamiento que llevaba la suprema del casar.

Después de unos platos principales que flojearon pasamos a intentar enjuagar nuestro descontento en el postre,  cosa bastante fácil normalmente, pero que este sábado no se produjo.

Pedimos consejo a la camarera para que nos ayudara a decidir entre Tarta de queso con moras y Tarta de manzana y nueces, ya que nosotros no alcanzabamos el consenso y en esto que nos dejamos guiar por la frase de la camarera “Mi tarta preferida es la de queso con moras”.

Y tarta de queso con moras que pedimos,  es lo que pedimos pero no es lo que trajeron….la foto es real, no hay moras, tarta de queso con  algo de cacao, sirope de chocolate y por encima de la tarta de queso, mermelada...que ya por lo menos podían haber usado la de moras…en cuanto a la tarta, no dudo de que sea casera, pero  hay una marca de preparados alimenticios, que usando sus sobrecitos y siguiendo los pasos de la caja conseguiremos el mismo sabor que en esta tarta. TODA UNA LÁSTIMA  ¡¡¡¡

Después de nuestro fracaso a pedir la cuenta… 51 €

En cuanto al precio 51 € para dos personas, esta bien, aunque hubiera estado mucho mejor si nos hubieran gustado los platos que pedimos, seguro que hay mejores restaurantes vegetarianos en Madrid, con menos nombre y mucho más sabrosos que no tengan que adornar tanto los platos con otras cosas, en cuanto a la cuenta, aqui me paso algo que no me gusta, pagamos con 52 €, y nunca nos volvió a llegar la cuenta, ni la cuenta y las vueltas, que si pagas con dinero de más es para dejar propina…pero lo suyo es que te traigan la cuenta de nuevo y las vueltas y luego que el cliente elija lo que quiere dejar de propina.